Estos últimos cuatro días Irak
ha vivido una oleada de protestas. Centenares de manifestantes han salido a la
calle para pedir mejores servicios básicos y como medida de presión ante la
corrupción del Gobierno de la nación y el desempleo. Al menos setenta personas
han fallecido en las revueltas.
Las protestas en Bagdad, la
capital, se intensificaron el viernes por la tarde, cuando hubo cuatro muertos
por disparos de francotiradores. Poco después la población civil comenzó a
concentrarse en gran número en el centro de la ciudad, tratando las fuerzas de
seguridad de dispersarlos con gases lacrimógenos y tiros al aire, lo que causó
un elevado número de heridos.
El primer
ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, ha llamado a los manifestantes a
dialogar con el Gobierno.
----------------------by LFP
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