Las fuerzas militares y policiales del régimen de Nicolás Maduro dispararon ayer bombas lacrimógenas y perdigones contra los manifestantes seguidores presidente interino, Juan Guaidó. Guaidó había convocado para ayer, día 10, una gran marcha a la que había bautizado con el nombre de «Toma la calle». Su objetivo era caminar, desde cualquier punto del país, en protesta por el régimen de Maduro y acabar en la Asamblea Nacional.
El uso de la violencia, que dispersó la marcha antes de llegar a su destino, impidió que Guaidó tuviera éxito en su primera convocatoria masiva tras su reciente gira internacional.
El uso de la violencia, que dispersó la marcha antes de llegar a su destino, impidió que Guaidó tuviera éxito en su primera convocatoria masiva tras su reciente gira internacional.
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