Johnson anunció el pasado 27 de marzo, a través de un vídeo difundido por las redes sociales, que había dado positivo en el test. En ese momento, el Gobierno del Reino Unido ya había ordenado el confinamiento domiciliario de la población. Sin embargo, el primer ministro y los miembros más destacados de su Gobierno, seguían celebrando reuniones presenciales y acudía con normalidad al Parlamento.
Al dar Johnson positivo, el director médico del Gobierno, Chris Whitty, aconsejó su confinamiento en el número 11 de Downing Street, adyacente a la sede de Gobierno. El político se mostraba en ese primer anuncio decidido a seguir dirigiendo desde su encierro todas las actividades de respuesta frente a la crisis. En unas pocas horas, se supo que su ministro de Sanidad, Matt Hancock, y el propio Whitty, habían resultado también infectados por el virus y se iban a poner también en situación de aislamiento.
Durante los últimos días los síntomas del Primer Ministro han ido empeorando, por lo que se ha decidido su traslado al hospital para realizarle unas pruebas.
Carrie Symonds, pareja de Johnson y embarazada de más de seis meses, anunció este fin de semana que había pasado los últimos siete días recluida en su apartamento de Londres con síntomas claros de la enfermedad, de la que se estaba recuperando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario