Según los servicios de seguridad irakíes, un cohete cayó la pasada madrugada en la ultrasegura Zona Verde de Bagdad, cerca de la embajada de EEUU. Con este se elevan a veintiocho los ataques contra los intereses estadounidenses en el país en los últimos siete meses. Afortunadamente no hay que lamentar víctimas, aunque sí cuantiosos daños materiales. No se ha afirmado que el ataque haya tenido como objetivo la embajada, aunque Washington acusa habitualmente a las facciones iraquíes pro-iraníes de estar detrás de los incidentes relacionados con sus intereses en la zona.
Además, el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, dijo en unas declaraciones el pasado domingo que EEUU sería "expulsado" de Irak y Siria, dos países donde Irán ha continuado expandiendo su influencia a través de sus aliados políticos y paramilitares.
Las tensas relaciones entre EEUU e Irak, que acaba de formar un nuevo gobierno que buscaba acercamientos entre los dos países podrían verse afectadas.
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